· El peso/dólar sufre los efectos del
nerviosismo por China, y con un ritmo acelerado mantiene la tendencia de
depreciación. Ha superado cualquier referencia de techo y objetivo de corto y
largo plazo, y hoy se acercó a la resistencia psicológica en 17.0.
· La fuerza del movimiento ha provocado
que los indicadores técnicos retomen la dirección al alza, dejando atrás las
posibles divergencias que mencionábamos la semana pasada. Si bien es cierto es
que se acercan a los extremos de presión que en otro periodos de avance han
dado lugar a los descensos interesantes en la moneda, y por ello hoy está la
puerta abierta para ver por lo menos un descanso, lo más significativo es la
tendencia y hoy ésta sigue siendo al alza.
· En caso de haber retrocesos, ahora la
apreciación se podría ver acotada en primera instancia por el apoyo que hoy se
establece en la zona de 16.40.
· Al mismo tiempo, superar los 17.0
pesos por dólar, generaría mayores condiciones de especulación y lo podrían
llevar rápidamente al objetivo en 17.50.
· Al margen de lo anterior, ante la
depreciación reciente, es posible que, tanto la Comisión de Cambios, como Banco
de México, podrían reforzar las medidas para tratar de aminorar los efectos por
volatilidad externa, incluyendo un alza de tasas aún sin saber si efectivamente
la Resera Federal las subirá tan pronto como en septiembre.
· Sin embargo, por las condiciones de
incertidumbre y nerviosismo externos, los efectos por dichas medidas podrían
ser limitados y pasajeros, tal como ha sucedido en los meses recientes.
· Lo prudente es mantener la posición en el
DLRTRAC.
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